Читать книгу Un mensaje de @Dios para ti. Lecturas devocionales para jóvenes онлайн
72 страница из 161
—Pastor, en toda esa área inundada no existen islas, no vive nadie, tampoco hay un terraplén por donde se pueda caminar y nunca ha habido una casa por aquí. Es imposible llegar hasta aquí sin un bote. ¿Y cómo cruzó el río?
El pastor quedó mudo. Él no había visto ningún río. La próxima vez que el pastor visitó la zona era verano. Hizo el mismo recorrido en medio de una asfixiante polvareda. No encontró la isla donde habían estado las personas. No había una casa allí, no había un bote, no encontró el camino en alto relieve por donde había caminado y, como si todo esto fuera poco, pudo bajar al lecho seco del río Guapá Leon, cruzarlo y salir al otro lado. ¡Había más de cuatro metros de profundidad! El río estaba ubicado justo unos metros antes de donde los amigos que lo ayudaron le habían ordenado detenerse.
Entonces lo entendió. Había estado a punto de morir ahogado arrastrado por el río. El niño que ahora lo acompañaba para llegar a su destino interrumpió sus pensamientos.
—Pastor, toda la gente dice que eran ángeles.