Читать книгу El Códice mendocino: nuevas perspectivas онлайн

55 страница из 150

De manera similar a lo discutido por Brittenham y Mundy, la permanencia velada de tradiciones, modos de expresión, nociones de comunicación que trascienden lo explicitado por la imagen o la palabra es el contexto en que Frances F. Berdan discute la escritura glífica mexica en cuanto al Mendocino. No es este solamente un documento con carga política reivindicatoria en el mundo del virreinato temprano —como ha sugerido quien escribe— sino que, en su entretejido pictográfico, se evidencian relaciones culturales y políticas del mundo prehispánico mexica-huasteca-mixteca, en donde el dominio se expresa tanto por medio de la representación de la conquista como por medio de la traducción y apropiación de nombres geográficos de los territorios conquistados. Es el Mendocino un documento colonial de más de una forma. Es colonial en su contexto inmediato —en el mundo de las décadas de 1540 y 1550— pero también es un documento del colonialismo mexica, cuyos gestos y recursos parecerían hacerse eco. Tamapachco, “lugar de las palmas” en Huasteca, por medio de la adaptación pictográfica nahua se convierte en el “lugar de las conchas”, desvirtuando la especificidad ancestral de su nombre. De manera similar, Tenochtitlan se fonetiza y se distorsiona en la lengua española del XVI para hacerse Temistitan, en el peor de los casos, e incluso cuando su nombre se alfabetiza correctamente pierde no solo su equivalencia semántica, sino su especificidad cultural, histórica y ritual. El Tenochtitlan donde se produce el Mendocino es al mismo tiempo el altépetl que reclama para sí el ombligo del mundo, el lugar en donde, como muestra Diana Magaloni, se encarnan nociones de centralidad cósmica tan antiguas como el Olmeca del formativo medio, y la ciudad colonial en donde el cabildo indígena, gobernado por la élite sobreviviente tenochca, lucha para mantener su espacio e influencia. El doble eje texto-imagen de la historia tripartita del Mendocino negocia esta complejidad y articula una narrativa que trasciende el periodo entre 1325 y 1521, e inserta de manera inteligible al mundo mexica en el contexto multicultural del virreinato temprano.

Правообладателям