Читать книгу Palabras grabadas en mi alma. Testimonio de una discípula del maestro Peter Deunov онлайн
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La puerta se abrió y salté de mi silla. El Maestro estaba allí frente a mí. Besé su mano.* Me invitó a sentarme y se sentó a su vez en una silla de mimbre. Vestido con un traje gris claro, llevaba una bufanda alrededor del cuello adornada con un magnífico broche de oro. La bondad y la dulzura emanaban de toda su persona.
– Maestro, le ruego que acepte esta uva que he recogido de nuestra viña de Varna. Acabo de llegar a Sofía con mi padre. Estoy en mi último año de secundaria y, desde hace dos años, participo en las reuniones de la Fraternidad en nuestra ciudad. Pero como mis padres me lo prohíben, siempre me veo obligada a mentirles, a decirles que voy a visitar a una amiga o a dar un paseo. Por favor, Maestro, consiga que me dejen participar libremente en las reuniones.
Seguí contándole mi vida en detalle y él me escuchaba atentamente. Finalmente, dejé de hablar.
– ¡La verdad os hará libres! dijo el Maestro.
– Pero, por favor, dígame lo que debo decirle a mi padre para que entienda que no voy a un lugar poco recomendable, un lugar peligroso.