Читать книгу Aspectos fundamentales de la Mediación civil y mercantil. Especial referencia a la mediación en la Comunitat Valenciana онлайн
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En atención al grado de participación de las partes en la resolución de la controversia y de la existencia o no de un tercero que intervenga imponiendo la solución o facilitando que la misma llegue a alcanzarse, es habitual distinguir tres modos, cauces o vías de solución de conflictos: la autotutela, la autocomposición y la heterocomposición.
1. La autotutela
En la autotutela son las propias partes en conflicto quienes lo resuelven, quienes le ponen fin: en concreto, es la parte más fuerte la que impone la solución, de manera coactiva, a la más débil. En ese sentido, quizá sería más correcto afirmar que es una de las partes la que resuelve la controversia; la otra actúa como un mero objeto, dejándose imponer pasivamente la solución.
Las premisas de la existencia de la autotutela son dos:
- Presencia de una desigualdad entre partes (fuerte/débil).
- Inexistencia propiamente de un tercero (ni para resolver la disputa –imponiendo la solución– ni para ayudar a las partes acercando posiciones).