Читать книгу Santa María de Montesa. La orden militar del Reino de Valencia (ss. XIV-XIX) онлайн
161 страница из 179
LA CASA DEL MAESTRE
Tal como la Casa Real, también el maestre Soler tuvo casa propia, desde el principio de su mandato, y por tanto una serie de personas dedicadas a su servicio, de las cuales tan solo conocemos a algunos de sus miembros, porque aparecen citados como testigos en documentos autorizados por el notario de la Orden, donde se indica su oficio y que son personas «de domo domini magistri».
El maestre solía ir siempre acompañado en sus desplazamientos por uno o más comendadores y freires de la Orden, que se identifican en la documentación al mencionarlos en cada ocasión como «socii nostri». También tenía varios escuderos, que le asistían y atendían en todo cuanto necesitase, incluso actuando como sus procuradores, o como oficiales de la Orden, como se desprende de la documentación conocida. Se han documentado hasta cuatro escuderos a la vez al servicio del maestre, de un total de sietessss1 identificados, de los cuales dos de ellos aparecen a su lado a lo largo de la mayor parte de su mandato: Galcerà de Cortes (1320-1326) y Arnau Tarragona (1320-1325). Este último es el que aparece con más frecuencia en la documentación y debió de ser persona de total confianza de frey Arnau de Soler, quien en enero de 1321 lo nombró con carácter vitalicio baile de Sueca;ssss1 en 1322 fue procurador suyo ante la Santa Sede para pedir al papa la concesión de privilegios e indulgencias para la Orden;ssss1 y en marzo de 1325 lo nombró apoderado para seguir los pleitos que la Orden tenía con el obispado de Segorbe por percepción de diezmos en Castielfabib y Ademuz.ssss1