Читать книгу Universidad y Sociedad: Historia y pervivencias онлайн

130 страница из 268

2. Si, por contra, se amplía el concepto de la generación a más grupos (como por ejemplo universitarios y trabajadores, mujeres…), sus rasgos ciertamente se difuminan.

3. Ideológicamente, y no solo en España, son dos generaciones con horizontes culturales diferentes. Marc Baldó, «Los movimientos estudiantiles en la España de los cincuenta y sesenta», en Aurora Bosch; Teresa Carnero; Sergio Valero eds., Entre la reforma y la Revolución: la construcción de la democracia desde la izquierda, Granada, Comares, 2013, pp. 105-121.

4. Gonzalo Wilhelmi, Romper el consenso: la izquierda radical en la transición española (1975-1982), Madrid, Siglo XXI, 2016.

5. Elías Díaz, Pensamiento español 1939-1973, Madrid, Cuadernos para el Diálogo, 1974, p. 264 ss.

6. Por cultura política entiendo, siguiendo el rastro de Gabriel A. Almond y Sidney Verba, el conjunto de orientaciones que tienen las personas o los grupos sobre un sistema político y sus elementos así como las actitudes sobre el sistema y las formas de participación. Para el concepto cultura política, G. A. Almond y S. Verba, «La cultura política» en Almond et al., Diez textos básicos de ciencia política, Barcelona, Ariel, 1992, pp. 171-201 (la cita en p. 175), también Javier de Diego Romero, «El concepto de “cultura política” en ciencia política y sus implicaciones en historia», Ayer (2006), pp. 233-266.

Правообладателям