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Los columpios del paseo son más bien para Nico. El tobogán es muy pequeño, los columpios muy bajos y el sube-baja siempre tiene una cola enorme de niños pequeños. ¡Te eternizas para subir! Mientras merendamos, solemos estar en esos columpios para que Nico se lo pase bien y luego subimos a los de los mayores. Allí hay mesas de ping-pong, toboganes altos, una pista de skate muy peligrosa, que es para los de la clase de Isa, y barras con anillas para pasar saltando como los monos. De estas anillas ya se cayeron dos niños y se rompieron el brazo. Cuando voy con la abuela tengo prohibido subirme. Al lado del recinto de los columpios hay un césped donde nos dejan jugar al fútbol. Allí nos vemos los del cole y echamos un partido muchos contra muchos. Manda el dueño del balón, que siempre es el capitán. Nunca sabes quién es de tu equipo porque uno llega, otro se va... No hay porterías. Por eso hay tanto chupón. Si tienes el balón, ¡a puerta! Otros de mi clase van al prado a dar volteretas y a ensayar bailes para las fiestas del colegio.

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