Читать книгу Autonomía, dependencia y servicios sociales онлайн

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Aunque es importante comprender que la discapacidad no implica dependencia, según la OMS, alrededor del 10% de la población mundial tiene algún tipo de discapacidad. La dependencia afecta a parte de esta población y lo más importante para el análisis, cualquiera a lo largo de su vida puede padecerla, de forma temporal o permanente. Los datos que aparecen en este apartado recogen, a grandes rasgos, la radiografía sobre la dependencia que se ha publicado en el Informe España 2017 (Blanco et al., 2017).

Aunque en España existen personas con dependencia a todas las edades, entre los menores de 40 los resultados son escasos. Alrededor de 1,4 millones de personas dependientes superan los 65 años. En términos relativos significa que alrededor del 19% de todas las personas mayores son dependientes y que suponen el 63% de todas las que tiene algún tipo de discapacidad. El incremento de la edad y la prevalencia de la dependencia son directamente proporcionales, es decir, conforme aumenta la edad también lo hace la prevalencia de la dependencia. Desde los 80 años uno de cada dos mayores tiene alguna discapacidad y a partir de los 85 uno de cada dos mayores es dependiente. De cada diez dependientes, siete son mayores de 65 años. De cada cien hombres de 65 y más años trece son dependientes y nueve más tienen limitaciones funcionales. De cada cuatro mujeres una es dependiente. Siete de cada diez dependientes son mujeres. Y, aunque el cuidado de la salud y la educación pueden dar lugar a que las nuevas cohortes lleguen a la vejez con mejores condiciones de vida, todas estas personas necesitan diversos niveles de apoyo en su actividad diaria.