Читать книгу Menores y justicia Juvenil онлайн
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Dr. Fco. Javier de Santiago Herrerossss1
SUMARIO: ssss1. ssss1. ssss1. ssss1. ssss1. ssss1. ssss1.
1. ESTADO DE LA CUESTIÓN
El número de menores condenados por sentencia firme tuvo una variación anual del 3,28% alcanzando la cifra de 14.112 en 2019, según el Instituto Nacional de Estadística (INE)ssss1. Otras fuentes hablan de que os delitos cometidos por menores crecen un 52%, con casi mil juzgados. Los procesos de violencia de género se disparan un 46% con una media de 30 cada día; y los abusos sexuales aumentan en un 51% nace el sexting y toda una serie de delitos novedosos aunados con las nuevas tecnologías, etc. Pero claro, la categorización (a la luz de los perfiles psicológicos o criminales) no es la misma si se trata de un agresor sexual oportunista, que un brujo, un portalero, un grupal o un hedonista sádico, de un conocido o un desconocido, de uno que ataca a una víctima de alto riesgo o de una de un riesgo estado bajo, de un delito planificado o cometido espontáneamente y con armas de oportunidad, etc. Datos que no solo apuntarían a una vertiente policial o forense sino también muy a tener en cuenta de cara a intervenciones socioeducativas, psicoterapéuticas y/o para las medidas intra o extrajudiciales que se consideren pertinentes. Uno de los objetivos básicos de esta investigación es llegar a un conocimiento permita establecer las necesarias bases jurídico-científicas de una eficaz intervención con menores infractores. Pero hablar de intervención, es analizar el fenómeno desde un punto de vista dimensional más que categorial. La perspectiva categórica favorece el diagnóstico frente a la dimensional que apoya mas a los tratamientos o intervenciones. Pero paradójicamente habitualmente se habla de delincuencia juvenil (punto de vista categorial) cuando lo que realmente hay son delincuencias en plural (punto de vista dimensional)ssss1. En base a estos planteamientos, debemos atinar más en ¿cómo se inician desde la infancia, se consolidan en la adolescencia y progresan esos patrones conductuales específicamente delictivos de los adultos? y por ello consideramos prioritario y deseable poder realizar análisis de las conductas infractoras (perfiles directos) lo más rigurosos posibles.