Читать книгу Elige solo el amor: La relación divina. Libro VI онлайн
96 страница из 98
Tú, que has elegido la mejor parte y no te será quitada, tú que has elegido solo el amor, has de saber que eres parte esencial de esta obra. Sin ti estas palabras no existirían, como tampoco existiría el cielo. Eres un receptor del cielo.
Recuerda que lo que Dios da lo da para que sea compartido. Por lo tanto, el compartir lo que has recibido por bondad del cielo por medio de esta expresión angélica es algo que también compartirás. Lo harás porque tu corazón cantará feliz cada vez que comparta con tus hermanas y hermanos la sabiduría del amor. Como alma pura que eres, unida al amor eterno, con quien Dios mismo ha hecho un pacto de amor por el cual te has unido a él en estas palabras de vida eterna, tienes el derecho a ser feliz. Para ello debes reivindicar tu derecho de nacimiento de vivir en la alegría de compartir. Compartir lo que aquí has descubierto será tu gozo por toda la eternidad.
Te aseguro que cuando te decidas a compartir lo que eres en relación a Dios dirás, tal como tu Madre divina un día dijo para ti, por puro amor: todas las generaciones me llamarán feliz, porque el todopoderoso ha hecho grandes maravillas en mí. De ti brotará una dicha que no has conocido antes en la tierra. Una paz largamente olvidada. Y un amor que parecía perdido, pero que ha sido hallado para siempre.