Читать книгу La parte de bronce. Platón y la economía онлайн
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Sin ofrecer una respuesta definitiva sobre la posición de Platón frente a la economía, Étienne Helmer desarrolla una tesis novedosa según la cual, lejos de estigmatizar a la economía en sí misma, la crítica de Platón va dirigida contra las malas políticas y contra su incapacidad de regular la economía, de asignarle la función que le corresponde y de explotar su potencial en beneficio de la comunidad. Se trata, en otras palabras, de la necesidad de relativizar la idea de que Platón consideraría a la economía como un obstáculo mayor contra la planificación racional de la ciudad y contra la consolidación de los lazos de amistad de los que depende su unidad.
Surgida como respuesta a la voluntad de satisfacer las necesidades naturales que conducen a los hombres a asociarse, cuando la economía es abandonada a sí misma se transforma es una potencia destructiva que termina irremediablemente por despedazar el tejido social. Pero, lejos de considerar que la salvación de la ciudad residiría en la supresión de la economía, Étienne Helmer nos enseña que Platón es perfectamente consciente de la dependencia de la ciudad frente a la misma y de la fuerza cohesiva de una economía bien dirigida. Sumida a las reglas de una política auténtica, la economía representa una fuerza que no solo garantiza la supervivencia de las ciudades empíricas, sino que permite el acceso de sus miembros a una forma de humanidad más elevada y, valga la redundancia, más humana.