Читать книгу La parte de bronce. Platón y la economía онлайн
8 страница из 12
En virtud del carácter inquisitivo de su reflexión filosófica y de la puesta en relación de la economía con los demás aspectos de su filosofía, al finalizar este libro no sabremos si Platón es un precursor del capitalismo5, si preconiza su planificación o si aboga por una economía de mercado. Tales categorías, cuyas definiciones son motivo de vehementes discusiones6, pueden, en el mejor de los casos, orientarnos sobre la posición y el lugar del filósofo en la historia del pensamiento económico, pero nada pueden enseñarnos sobre su filosofía ni sobre la economía en sí misma, es decir, sobre el sentido de las prácticas económicas que él preconiza o critica. A la imposibilidad de reconocer el sentido o la utilidad de dichas prácticas, se suma la dificultad, ya mencionada, de la ausencia de sistematicidad de su teoría sobre la economía. Sin embargo, pese a su carácter asistemático, es posible reconocer en ella una tesis sólida y coherente, la cual se enuncia en tres momentos. En el primero, la economía se presenta como una realidad ambivalente, pues ella hace y deshace la ciudad. La hace en la medida en que está en su origen, dado que lo que impulsa a los hombres a asociarse es la necesidad de satisfacer sus apetitos materiales. Pero paradójicamente, en razón de una necesidad antropológica, estos mismos apetitos, cuando son abandonados a sí mismos, tienden espontáneamente a la desmesura y conducen a la ciudad al conflicto tanto interno como externo. En este sentido la economía deshace la ciudad.