Читать книгу Camino al Armagedón онлайн

37 страница из 127

Ahora es tiempo de examinar a Ezequiel e Isaías para averiguar qué provocó esta rebelión.

Ezequiel 28:11 al 17

Este pasaje de Ezequiel y el siguiente de Isaías tienen varias cosas en común. Por ejemplo, aunque entendemos que Ezequiel e Isaías describen a Lucifer en estos versículos, ambos están en el contexto de endechas proferidas por los respectivos profetas contra dos de los reyes más conocidos de su época. Ezequiel reprendió al rey de Tiro, e Isaías reprendió al rey de Babilonia.

El lamento de Ezequiel contra el rey de Tiro comienza con las siguientes palabras: “Por cuanto se enalteció tu corazón, y dijiste: Yo soy un dios, en el trono de Dios estoy sentado en medio de los mares (siendo tú hombre y no Dios), y has puesto tu corazón como corazón de Dios” (Eze. 28:2).

No hay nada particularmente inusual en que un rey terrenal se considere divino; los faraones y los césares también hicieron esta afirmación. Sin embargo, los versículos 11 al 19 describen a un ser que es mucho más que un monarca terrenal. Acerca de las palabras de Ezequiel, el Comentario bíblico adventista afirma: “Aunque son una endecha por el rey de Tiro, sin duda tienen una aplicación más amplia que la que se hace directamente al príncipe de Tiro. Las figuras trascienden tan ampliamente una aplicación tan limitada, que ni siquiera la suposición de que este pasaje sea ‘extremadamente irónico’ puede resolver los problemas que surgen si solo se le da una aplicación local [...]

Правообладателям