Читать книгу Un despropósito ecuatorial. Volumen I онлайн

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La Sociedad Geográfica había recibido el título de Real el 18 de febrero de 1901, casi al mismo tiempo que Jover su nombramiento como Comisario Regio -una ofensiva sin duda cultural de la monarquía-. En 1971 y a raíz de los destrozos provocados por un incendio, la Sociedad trasladó su colección de libros a la Biblioteca Nacional, lo que ha facilitado que se conserve y esté disponible el texto.

Vale la pena recordar que fue precisamente la Real Sociedad Geográfica, en colaboración con el Observatorio Astronómico de Madrid, quienes habían asesorado a los expedicionarios y les proveyeron de instrumental científico.

Es verdad que algunos fragmentos de las cartas escritas por Pedro Jover traslucen un romanticismo necrófilo y patriotero que permiten pensar que en algún momento de ofuscación pudo llegar a imaginar la muerte como una alternativa deseable:

…pedí a Dios que antes que tener que arriar la bandera humillada y vencida alguna vez, cayese envuelto en sus pliegues y sirviera de sudario a mi cadáver75

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