Читать книгу Por un futuro rural. Innovación, renacimiento rural y nuevos itinerarios de desarrollo en la Argentina онлайн
8 страница из 34
Lo rural no es solamente la agricultura.
Lo rural es un tipo de territorio que incluye campos con sus múltiples actividades productivas, pero también pueblos y pequeñas ciudades. Para definir los territorios rurales y diferenciarlos de otros tipos de espacios, los países establecen criterios que toman en cuenta alguna característica particular, como pueden ser la población, las formas de administración, el tipo de producción predominante o el tipo de infraestructura y equipamiento disponibles. La Argentina utiliza el criterio demográfico, y define como rural a los territorios donde la población vive dispersa en el campo y en localidades de menos de 2.000 habitantes.1 Según este criterio, en la Argentina rural vive menos del 9% de la población total. A partir del criterio demográfico, nadie dudaría en afirmar que el campo, con sus parcelas cultivadas o su ganado y con muy pocos habitantes, es claramente un espacio rural. Sin embargo, surgen problemas cuando consideramos los pueblos y las ciudades. ¿Cuándo un pueblo o una pequeña ciudad puede ser considerado como rural? ¿Es “más rural” un pueblo de 1.800 habitantes que uno de 2.500 o que una localidad de 15.000 habitantes que produce bienes y servicios ligados a la producción agropecuaria? Esta discusión no es exclusiva de la Argentina, sino que se plantea en todo el mundo, especialmente en las últimas décadas, cuando la fuerte movilidad de las personas y el desarrollo de las comunicaciones modificaron los criterios para establecer los límites territoriales entre lo rural y lo urbano.