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Oswald apareció al final de la escalera con un caballero larguirucho que le recordó a Zhi la canción infantil sobre Jack Sprat y su esposa. Este hombre representaba sin duda el papel del marido flaco del cuento.

—"Un tal Sr. Schiessl quiere verle, Alteza".

Zhi no conocía el nombre. Pero no conocía muchos de los nombres de las personas que pasaban por la finca. Su familia ya no organizaba fiestas debido al estado del antiguo duque. Pero sí recibían visitas a causa de las transgresiones del antiguo duque.

¿Qué sería hoy? ¿Deudas de juego? ¿Contratos impagados? O peor, ¿otra demanda de una prueba de paternidad?

—"Informé al caballero de que no estaba en casa para recibir visitas". Con la nariz en el aire, como si oliera algo sucio, Oswald hizo la interpretación perfecta de un mayordomo presumido.

—"Lo siento, señor", dijo el Sr. Schiessl, poniendo su propio aire presumido. "Pero tendrá que verme. Es un asunto de negocios urgente".

—"Se dirigirá a él como Su Excelencia", le respondió Oswald con aire presumido.

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