Читать книгу Cómo construir matrimonios felices онлайн

23 страница из 27

Refuerzo de la agresión. Ante tal violencia, la víctima cesa en sus reacciones y provocaciones, por temor y por defensa de su integridad, sometiéndose y echándose la culpa para apaciguar al maltratador, lo cual es interpretado por este como “La violencia funciona”; “Si no le pego, no entiende”; es decir, como un reforzador que impone la idea de la conveniencia de la violencia y la posibilidad de repetirla.

Fase de arrepentimiento. Después de la crisis, los protagonistas quedan muy afligidos por lo ocurrido. Puede ser que la víctima haya quedado malherida y necesitada de atención médica. El iracundo, al calmarse, se da cuenta de que “se me fue la mano”. Entonces, dolorido, pide perdón y promete que nunca más volverá a hacerlo.

Perdón de la víctima. Ya sea que la víctima se sienta conmovida por el pedido de perdón, que crea en su arrepentimiento o porque se da cuenta de que no tiene otra alternativa, por no poder separarse o por alguna otra razón, le concede el perdón, cerrando el capítulo y concluyendo en no hablar más del asunto.

Правообладателям