Читать книгу Verbos de cal y arena онлайн

15 страница из 33

Agradecer

Ahora estaban las tres solas, intentando salir adelante en un momento difícil, no sólo para ellas, sino en general. Había poco trabajo, mal pagado y Celina trabajaba en todo lo que le iba saliendo.

No tenían un lugar propio para vivir, así que pasaron un tiempo cuidando a una anciana en su casa, luego cuidando de una casa porque su dueña estaba de viaje; hasta que una señora que conocían de las reuniones semanales de los viernes le ofreció a Celina alquilarle un pequeño apartamento que tenía al fondo de su propia casa.

Aquello les pareció un paraíso. Era diminuto, con una habitación mal ventilada, pero estaban las tres juntas y tranquilas.

Las tres le dieron las gracias a la señora, que se convirtió en una buena vecina y amiga.

Celina encontró un trabajo estable y con mejores condiciones laborales.

Muchas veces se habían sentido vulnerables pero siempre habían podido contar con personas que con un pequeño gesto solidario, ayudaron a solventar difíciles situaciones; y eso no lo han olvidado nunca.

Правообладателям