Читать книгу Dimelo cantando онлайн

66 страница из 120

La conversación se extingue cuando Finn aparca frente al edificio. Se trata de un bloque de pisos situado en una calle poco transitada. Las luces del ático parpadean y cambian de color. Parece que hemos encontrado nuestra fiesta.

—¿Preparadas?

Es una suerte que Chloe responda por mí, ya que no puedo hablar.

—Preparadas y dispuestas a patear traseros.

Salimos y Finn nos conduce al interior. Cuando nos montamos en el ascensor, me miro al espejo una vez más, nerviosa. Me clavo las uñas en las palmas con tanta fuerza que me hago daño. Finn se da cuenta y me da un empujón suave para relajarme.

—Todo irá bien —me asegura.

—Mason, Blake, Sam, Alex —pronuncio de sopetón—. Hablaré con ellos en ese orden.

Frunce los labios con consecuencia.

—Es mejor que dejemos a Mason para la fase tres.

—No tengo ningún problema con él.

—Le rompiste el corazón a su mejor amigo y lo ignoraste durante un año y medio mientras se comía la cabeza por ti. Créeme, Holland, sí lo tienes.

Sus palabras me habrían dolido si no tuviera la sensación de que hay cosas que no me está contando. Cuando llegamos a la planta superior, Finn se asegura de que salga antes que él, como si temiera que en cualquier momento pudiera salir corriendo. Solo habla una vez más antes de llamar a la puerta del apartamento:

Правообладателям