Читать книгу Mercados del lujo, mercados del arte. El gusto de las elites mediterráneas en los siglos CIV y XV онлайн

196 страница из 265

Sin esa voz escrita que las ha detenido en su último destello, antes de almonedarse, cambiar de manos, de estado o perderse para siempre, desconoceríamos la intensidad de esas superficies del lujo. Solo los inventarios nos permiten acceder a la superficie de un lujo perdido.

ssss1M. A. Zalama: «Juana I de Castilla: el inventario de los bienes artísticos de la reina», en F. Checa (dir.): Los inventarios de Carlos V y la familia imperial, Madrid, Fernando Villaverde ediciones, The Getty Foundation, 2010, I, p. 849.

ssss1M. A. Zalama: «Juana I de Castilla…», cit., p. 848.

ssss1Diego Ribera fue nombrado camarero de la infanta Juana en 1496 cuando preparaba el viaje de bodas. Fernando el Católico le ordena que inventarié sus bienes como reina en julio de 1509. El inventario anterior (1496-1509) se perdió cuando la Santa de Junta de las Comunidades llegó a Tordesillas en agosto de 1520 y lo quemó, según testimonio de Ribera, con otros libros viejos.

ssss1M. A. Zalama: «Juana I de Castilla…», cit., p. 859.

Правообладателям