Читать книгу España y su mundo en los Siglos de Oro. Cronología de hechos políticos y culturales онлайн

60 страница из 67

El Imperio Otomano

En todo este impresionante movimiento de expansión, sólo los turcos constituyeron un obstáculo y un peligro para los europeos. Con una fuerza que había comenzado a manifestarse desde mucho tiempo antes, los turcos consolidaron, durante el siglo XVI, sus posesiones en África del Norte, en Asia y aun en Europa. Solimán I, “El Magnífico”, guió a su pueblo a un apogeo que, en la primera mitad del siglo XVI, llegó a abarcar entre sus dominios el Mediterráneo entero. Cada año salían de Constantinopla flotas turcas que ejercían la piratería en el mar y asolaban cuantas poblaciones quedaban a su paso. Sobre todo España se vio afectada durante esta época al ver mermados con frecuencia los suministros de alimentos, mercancías y tributos que le llegaban principalmente de Italia.

Arte y pensamiento

El arte renacentista

Esencialmente laico y vinculado a la vida cotidiana, el arte del Renacimiento buscó la exaltación de todos los sentidos. Como surgía de un nuevo sentimiento y de una nueva percepción de la forma, adquirió el aspecto de los modelos clásicos. El tema principal era el ser humano, cuya belleza física fue destacada en grandes dimensiones y en formas atléticas, incluso cuando se trataba de representar a Dios, a las vírgenes y a los santos. Las formas angulares del Gótico fueron sustituidas por otras redondeadas que evocaban sensualmente la plenitud de los frutos maduros y las carnes opulentas. Era un arte que tenía como fin último la creación de un mundo superior y perfecto que exaltara la dignidad humana y por eso se basó en la razón, buscó la armonía como un sistema de proporciones y perspectivas, y aspiró a ser percibido como un todo lógico, es decir, ordenado, simétrico y regular, en donde el espacio era adaptado a las necesidades humanas.


Правообладателям