Читать книгу Violencia de género: retos pendientes y nuevos desafíos онлайн

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El ser humano, como ser social, desde los inicios, ha tendido a relacionarse con el resto de individuos de su grupo. Fruto de estas relaciones han ido surgiendo, a lo largo de toda la historia, una serie de conductas que abarcarían desde el intercambio de emociones e ideas (positivas, negativas o neutras), a la imposición de determinadas voluntades, planteamientos o dogmas, para los que se habrían utilizado medios más o menos coactivos. Del análisis de estos últimos surge el término “violencia” que, en función del ámbito de aplicación, recibiría un significado diferente.

Del latín violentia, se contempla como la acción contra el natural modo de proceder, o al menos así lo entiende la Real Academia de la Lengua Española. Pero, ¿qué es el natural modo de proceder? ¿cuándo se entiende que alguien es violento y por qué? Quizás más sencilla sería la definición que entiende la violencia como el uso de la fuerza para conseguir un fin, especialmente para dominar a alguien o imponer algo, y que casa con esa idea de imposición que narrábamos anteriormente.