Читать книгу Elige solo el amor: La relación divina. Libro VI онлайн

49 страница из 98

Cuando digo que te decides a vivir en una relación con lo que has descubierto como única verdad acerca de ti, estoy diciendo que eliges vivir dentro de la relación divina, es decir, dentro de la realidad del amor. Aceptar que eres Cristo y ninguna otra cosa. Esto es lo mismo que decir que aceptas que eres amor y nada más que amor. Y que Dios, o la fuente de tu ser, como prefieras llamarlo, es quien te instruye, guía, informa, conduce, mueve y vive. Esto es lo mismo que decir que tu voluntad se ha unido a la de tu creador por un acto deliberado de tu albedrío. Así es como Dios pasa a ser tu alegría, tu gozo y tu plenitud.

Si lo que eres fue establecido por Dios y permanece unido a su creador, en una unidad que nada puede separar, tal como la vida no puede separarse de aquello a lo que le da vida, pues dejaría de tener sentido su razón de ser, entonces nunca dejaste de ser el Cristo viviente que vive en ti, a pesar de que hayas transitado un camino en el que creíste que eras otra cosa.

Una vez que aceptas quién eres en verdad y vives en armonía con ello, ¿qué efecto puede tener la muerte sobre ti? Ninguno. Por eso es perfectamente veraz la afirmación que dice que la muerte no existe, ni tiene consecuencias. No la tiene para lo que eres. En última instancia, en la muerte no sucede nada. Simplemente lo que eres continúa buscando ser manifestado. Si ya se le permitió que eso ocurriese en la vida, entonces seguirá haciéndolo por siempre. Aquí tienes la más sencilla y clara definición de vida eterna.

Правообладателям