Читать книгу Ni una boda más онлайн
11 страница из 106
–Oye, no estaba tan mal –Maisy le dio un empujoncito en el hombro.
–Como alguien con entrenamiento en colores complementarios –apuntó Violet después de soltar una risita–, puedo decir con total seguridad que sí estaba muy mal. Sobre tu cama también tenías un póster de ese tipo cavernícola de cabeza grande, nariz enorme y boca extrañamente pequeña.
Maisy suspiró tan fuerte que resonó entre las paredes.
–Era un póster de One Tree Hill, si no captaste el encanto de Nathan Scott es porque no viste la serie.
–Sí la vi, Lucas Scott era mucho más guapo que su hermano.
–¿Lo dices en serio? Tiene la cara aplastada. Y nunca abre los ojos por completo.
Violet iba a comenzar a discutir, pero prefirió cerrar la boca.
–Buen punto en esa última parte, pero tenía una cabellera genial. Además, los paliduchos de pelo oscuro no son mi tipo.
Maisy se escondió detrás de la oreja un mechón de pelo castaño que había escapado de su cola de caballo.
–¿Descartarías a un tipo solo por eso?
Aunque a Violet nunca le había gustado el apellido Hurst, no le quedaba más que aceptar el mismo tono café rojizo oscuro en su cabello que el de su padre, su media hermana y su medio hermano. Cada vez que los visitaba, ese era el rasgo característico que hacía que los lugareños exclamaran: “Vaya, eres toda una Hurst”.