Читать книгу Noche sobre América. Cine de terror después del 11-S онлайн

144 страница из 231

En el cine de terror, a menudo el trauma es un patrimonio del individuo, por lo que su universalidad sólo puede entenderse en términos de experiencia humana. El sexto sentido, por ejemplo, gira en torno a las ideas de duelo y pérdida, de trauma y melancolíassss1, con las que podemos sentirnos identificados; sin embargo, las angustias de El sexto sentido o Déjame entrar (Låt den rätte komma in, Thomas Alfredson, 2008) responden más a la construcción de la subjetividad que a la gran herida histórica. A fin de salvar este escollo, Lowenstein define la posmodernidad como una era traumática per se, como una «cultura de la herida», centrada en la repetición imaginaria del shock y sus efectos. Lowenstein tomaba esta idea de Mark Seltzer (1997: 3, 5), quien describía la cultura de la herida como «la fascinación pública por el cuerpo abierto y desgarrado y la personalidad abierta y desgarrada, una aglomeración colectiva en torno al choque, el trauma y la herida. […] La herida y su extraño atractivo se han convertido en una forma de situar la violencia y el erotismo —la violencia erótica— en la encrucijada entre la fantasía privada y el espacio colectivo, es lo que yo llamo la esfera pública patológica».


Правообладателям