Читать книгу El gobierno de la función legal en las organizaciones. Operaciones legales, Innovación y Digitalización онлайн
88 страница из 229
Ahora bien, el Director, y toda su Asesoría Jurídica, deban preservar su independencia respecto del Consejero Delegado y el comité de dirección. De otra manera, se vería impedido para realizar su función adecuadamente y conservar su credibilidad e influencia en la empresa a la larga. De hecho, corresponde al Director de la Asesoría Jurídica promover que se establezcan los mecanismos que le permitan encontrar el difícil equilibrio entre su posición como directivo de la empresa y sus deberes fiduciarios hacia la compañía. Uno de ellos, como veremos a continuación, es el acceso libre y directo al Consejo de Administración. Pero es más, el Director de Asesoría Jurídica debe reunir y cultivar unas cualidades personales (“soft skills”) que en este punto resultarán esenciales para preservar su independencia: en primer lugar, debe ser capaz de oponerse abiertamente a aquellas decisiones que considere no son en el mejor interés de la compañía; en segundo lugar, debe tener la valentía de hacerse oír incluso en situaciones en que le pueda incomodar personalmente; en tercer lugar, debe contar con la diplomacia y el tacto necesarios para trasladar sus puntos de vista de forma constructiva; y finalmente debe contar con la credibilidad necesaria dentro de la compañía para que tanto el Consejero Delegado como los miembros del Comité de Dirección valoren positivamente sus aportaciones incluso cuando exista desacuerdo entre ellosssss1.