Читать книгу Guía práctica para descubrir la voluntad de Dios онлайн

15 страница из 26

Una vez más, cuando le pides a la gente que cuestione la suposición de que un Dios amante y omnisapiente armaría un plan único ideal para que descubramos y elijamos, al final siempre se hace evidente la locura de un plan semejante. Uno de los conceptos más básicos que debemos comprender antes de cavar más hondo en el plan de Dios es que él puede ser omnisapiente siempre, pero al mismo tiempo puede ser completamente libre en dejar a los seres humanos elegir lo que les plazca. El hecho de que Dios conoce el futuro no significa que Dios elige y determina un curso de acción para nosotros. No quiero caer en el pensamiento de creer que conozco lo que Dios sabe y no sabe. Algunos teólogos, aunque bien intencionados, han buscado determinar lo que Dios sabe y lo que es incapaz de conocer basados en lo que ellos se imaginan. El problema es obvio: el conocimiento de Dios, su poder y habilidades están mucho más allá de nuestros límites de comprensión:

“Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” (Isa. 55:8, 9)

Правообладателям