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Lo que sucedió a continuación tuvo mucho que ver con la intervención de Benjamín Balboa López.

En julio de 1936 Benjamín estaba destinado como oficial de tercera clase del cuerpo auxiliar de telegrafistas en la estación de Ciudad Lineal. El día 18 estaba de guardia, y a las 6:00 de la mañana captó en morse el siguiente mensaje:

Gloria al heroico ejército de África. España sobre todo. Recibid el saludo entusiasta de estas guarniciones que se unen a vosotros y demás compañeros Península en estos momentos históricos. Fe ciega en el triunfo. Viva España con honor. General Franco.

El destinatario de aquella trasmisión debía de haber sido el superior de Benjamín, un tal Ibáñez Aldecoa, quien hubiera tenido a su vez que ocuparse de difundirlo a todos los oficiales. Su subordinado comprendió sin embargo la gravedad de lo que estaba sucediendo y lo encerró a punta de pistola. A continuación transmitió otra comunicación de signo contrario, informando de lo ocurrido y animando a las tripulaciones a tomar el mando de los buques.

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