Читать книгу Diario de un adolescente precoz colombiano онлайн
119 страница из 173
Me tomó de la mano y sentí por primera vez que alguien me mostraba un poco de afecto, estaba viviendo una época difícil en mi vida, su acto de cariño hacia mí, me llenó de sentimientos y me solté a llorar, él no podía saber el porqué de mi llanto, yo no sabía su nombre, me dijo que se llamaba William, que ya me lo había dicho, pero seguro no le había prestado atención, volvió a besarme mientras me abrazaba.
Me dijo que nunca otro chico le había llorado y la verdad no sé qué decirte, no sé si sentirme bien o mal, pero tu rostro lo dice todo y hoy quiero darte una buena experiencia.
Nos fuimos caminando cogidos de la mano, pasamos por la calle Décima, a la altura de la Notaría Diez, allí había muchas travestís ejerciendo de prostitutas, nos gritaban “tan lindas, las mariquitas”, me asusté, pensaba que de pronto nos iban a robar y él me dijo que no prestara atención, que no me preocupara, estábamos atravesando el centro de la ciudad para llegar a la Avenida 2 Norte y llegamos a un sitio.
Era una casa, entramos y había en la puerta una recepción, era todo oscuro, no conocía ese sitio, pidió una habitación y pagó todo. Pude ver al fondo que había más hombres y estaban todos besándose, así que di por hecho que era un sitio para gays y que iban a follar, pero no me importaba, estaba encantado de estar con William.