Читать книгу Enemigos íntimos. España y los Estados Unidos antes de la Guerra de Cuba (1865-1898) онлайн
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A pesar de los buenos auspicios, los litigios que la Primera República no había tenido tiempo de solucionar siguieron sin resolverse e incluso se agudizaron. La dictadura de Serrano había nacido con el apoyo de los grupos coloniales y esto se tradujo en una escasa voluntad para proteger los intereses norteamericanos en Cuba107. Desde el principio, el gobierno presidido por el propio Serrano (3-I-1874/13-V-1874) enfrió la buena voluntad de los Estados Unidos negándose a cumplir dos de las condiciones del Protocolo de diciembre de 1873 que había puesto fin a la crisis del Virginius: el abono de las indemnizaciones prometidas a los familiares de los norteamericanos ejecutados en Santiago de Cuba y la persecución de los oficiales responsables de esas ejecuciones108. Pero el mayor problema bilateral siguió siendo el incumplimiento del Decreto del 12 de julio de 1873, una de las medidas que las autoridades coloniales y el partido español tenían más interés en revertir porque amenazaba el aumento de los patrimonios peninsulares que estaba acompañando a la Guerra de los Diez Años109.