Читать книгу La soportable gravedad de la Toga онлайн

62 страница из 70

Al día siguiente salió publicada mi tribuna “El pediatra errante” (el título tiene que sugestionar al lector), donde critico la creación de una nueva categoría de este profesional porque erosiona sus condiciones de trabajo y, además, porque perjudicaría la asistencia a nuestros hijos. El enlace a la tribuna se propagó por internet como pólvora en llamas hasta el punto de generar un movimiento espontáneo pero masivo de rechazo al proyecto, que obligó al gobierno gallego a su retirada al cabo de 48 horasssss1.

De otros medios (un periódico y dos emisoras de radio) me llamaron para hacerme entrevistas, pero las rehusé excusándome por el trabajo que tenía (cierto), aunque lo que pretendía era evitar un protagonismo que consideraba desmedido, pues me había limitado a dar una opinión y además, retirada la norma el tema ya no debería tener más recorrido (aunque el político frustrado siempre llama dos veces, así que habrá que estar ojo avizor).

El jueves pasado se presentó mi nuevo libro en una conocida librería de Vigo lo que también tuvo su repercusión con reseña y fotografía del acto en la prensa. A raíz de ese acontecimiento me llamaron de una publicación profesional para hacerme una entre-vista, y en este caso accedí porque se trataba de explicar lo que con mi libro pretendo, que no es sólo aportar una herramienta jurídica a los profesionales del Derecho Sanitario y de la medicina legal, sino también contrarrestar a un sector de la doctrina que aboga por una regulación en esta materia que no comparto. Considero que con la entrevista no sólo promociono mi libro, sino, para mí más importante, promociono una idea o concepto nuevo con la que pretendo crear tendencia doctrinal en esta materia.

Правообладателям