Читать книгу Sin miedos ni cadenas. Lecturas devocionales para damas онлайн

41 страница из 160

Tú y yo somos obras de arte, poemas únicos del amor y la gracia divinos. Imagina a Dios como una abuela, que teje un suéter o borda un aplique. Imagina a Dios como un cocinero, que prepara su mejor pastel. Imagínalo como un luthier, que construye un instrumento musical. Como un escultor, como un pintor, como un matemático que crea un teorema. ¿Puedes verlo sonreír, lleno de felicidad y un amor exuberante por su creación? ¡Claro que sí! Con esa misma sonrisa, con el mismo brillo en sus ojos, Dios te mira hoy y te dice: “Hija, tú eres mi obra maestra, eres mi poema”.

Señor, tú eres el Artista Supremo. Yo soy tu poema, tu obra de arte. Soy la expresión del amor y creatividad de tu corazón. Por eso, soy única, valiosa y bella. Confío en tu capacidad y en tu fidelidad para completar la obra que comenzaste en mi vida. Sé que no te detendrás hasta que refleje tu gloria más plenamente.

19 de enero

Pasaporte


“Pero a los que lo aceptaron y creyeron en él, les dio el derecho de ser hijos de Dios” (Juan 1:12, PDT).

Правообладателям