Читать книгу Micky Ondas, un goleador de otro planeta онлайн
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Mientras ascendía por esa escalera casi sin luz, de pronto se detuvo, se agachó y ahí las vio. Hormigas trabajando en perfecta armonía, en espectacular organización. Se acercó a ellas y les susurró:
–A ustedes debería estar investigándolas, tan inteligentes y perfectas.
–¡Permiso! –escuchó sobresaltado, pero su OSS lo calmó. De la parte superior de la escalera apareció un ser humano, con una bolsa negra llena en la mano y el teléfono móvil en la otra. El hombre bajó apurado y se dio vuelta hacia Micky, explicándole su prisa.
–Perdón, pero debo sacar los residuos ya mismo antes de que pase el recolector.
Abrió el portón, salió y el muchacho fue tras él para ver qué hacía. Todo podía ser sujeto de su estudio. ¿Habría pasión en sacar la basura?
El hombre dejó la bolsa apilada junto a otras y se quedó mirando la pantalla del aparato rectangular mientras con dos dedos la apretaba a intervalos cortos e irregulares.
Micky decidió continuar subiendo hasta que llegó a la puerta del departamento 2º C; según su programación ese era su nuevo hogar. ¿Qué encontraría allí?