Читать книгу Micky Ondas, un goleador de otro planeta онлайн
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–Hola, tú debes ser el nuevo vecino del 2°C.
–Ehh… sí… ¿Cómo lo sabes?
–Aquí todo se sabe; como dice mi papá, el deporte nacional de este lugar es el chismorreo. Soy Maite del 1°B, ¿y tú?
–Yo… Micky.
–¿Y de dónde vienes Micky tan temprano? Estamos en vacaciones, seguramente fuiste a hacerle alguna compra a tu mamá, a la que, a propósito, no he visto todavía.
–Es que ella está…
–No importa. Tengo que irme ya mismo al club para no perderme la clase de natación. ¿Tú sabes nadar?
–Yo, nadar… –quiso responder el joven, un poco desbordado por la verborragia de la niña.
–No importa si no sabes, no es ninguna vergüenza. ¿Por qué no me acompañas? Puedes conocerlo y, si te gusta, puedes practicar algún deporte que te llame la atención: además de natación, hay baloncesto, tenis, fútbol…
“Fútbol”, pensó. “Puede ser una buena oportunidad para profundizar lo que vi en la televisión”. Y aceptó la invitación.
–¿Tienes bicicleta? Si no, usa la de mi padre; está allí, debajo de la escalera. Tráela y vamos.