Читать книгу El bautismo del diablo. La evolución y la seducción del cristianismo онлайн

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En contraste, en la era de Galileo las personas estaban menos listas para contradecir a Aristóteles, cuyos escritos saquearon y desmantelaron intelectualmente la cultura del momento. Los estudiantes que entraban en las universidades de la Edad Media recibían la instrucción de descartar cualquier enseñanza que fuera en contra del “Filósofo”, como había llegado a ser conocido Aristóteles. William R. Shea escribió: “Los escritos de Aristóteles que han estimulado discusiones avivadas fueron de manera creciente convertidos en un dogma rígido y en criterios mecánicos de la verdad. A los otros sistemas filosóficos se los trataba con desconfianza”.44

Al igual que la manía de hoy de interpretar todo en un contexto darwiniano (desde la forma de la oreja de los perros a nuestra “tendencia natural a ser amables con nuestras relaciones genéticas y, sin embargo, ser xenofóbicos, desconfiados e incluso agresivos con personas de otras tribus”),45 en ese entonces, la enseñanza de Aristóteles era el filtro a través del cual se debía entender todo, desde el movimiento de las estrellas hasta la naturaleza del pan y el vino en la Eucaristía.

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