Читать книгу El fascista estrafalario. Volumen II онлайн
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Por esa misma razón es deleznable que en 1942 haya escrito …hay quien afirma -gente enemiga- que las heridas no están cicatrizadas aún. Fin de la cita. Como apostilla siempre Rajoy.
En páginas posteriores vamos a revisarlo más en detalle, pero me cuesta dejar de adelantar algunos párrafos que proporcionan una idea de lo que pensaba Gecé sobre la mujer o sobre las relaciones entre los pueblos. Es bueno recordarlos, porque sirven de antídoto definitivo a cualquier tentación de dejarse seducir por su obra.
Y es que de ese pensamiento hegemónico es del que provenimos los españoles.
El olor a madre emborracha más que el olor a hembra.40
Es natural que frente a una ´masculinidad´ que se rebaja a oficios tan lacrimosos y caninos, frente a aquellas cortesanas o vampiresas del Renacimiento, surgiese la reacción contraria. La del Hombre que tratase a las Mujeres como a objetos de recambio. Surgiese DON JUAN.41
Nosotros, como Don Juan, tras haberla conquistado la soñamos como Purísima.42
La mayor parte de ellos, magníficos combatientes, viriles a la española, con sangre de machos imperiales en sus venas.43