Читать книгу Dimelo cantando онлайн

108 страница из 120

—¿Hablarás pronto con los demás? —me pregunta, dando un sorbo a su batido.

—Sí. Quería probar a hablar con Mason, pero creo que lo intentaré con Sam primero.

Se tensa al escuchar su nombre. Hace todo lo posible por desviar mi atención.

—Supongo que podrías llamarlo cuando vuelva a la ciudad.

Y lo consigue.

—¿No está en Londres?

—No, está en Newcastle, con sus padres. —Me mira, expectante. Como no reacciono, añade—: Su padre está muy enfermo. Lleva unos meses ingresado. Sam va a menudo para visitarlo. ¿No lo sabías?

Me quedo helada. ¿Qué?

¿Así que era eso? ¿A esto se refería mamá cuando me dijo que estaban pasando por una situación difícil? ¿El padre de Sam está en el hospital? ¿Por qué? ¿Y desde cuándo? Unos meses es mucho tiempo. No quiero ni imaginarme lo difícil que habrá sido para Sam compaginarlo con sus estudios en Medicina.

Debería haber estado ahí para él.

—Está bien, ¿verdad? —pregunto rápidamente—. Quiero decir, está ingresado y todo esto, pero ¿se va a recuperar?

Blake lleva sus ojos a los míos y con eso ya me lo dice todo.

Правообладателям