Читать книгу Diario de un adolescente precoz colombiano онлайн

147 страница из 173

En la noche pude ver que mi amigo Julián, estaba trabajando en el negocio, salí y me puse a charlar con él sobre la fiesta, mientras él me preparaba algo especial para comer. Yo no pensaba desistir de él, me daba muchísimo morbo mi amigo el costeño, así que empecé a contarle lo que aconteció, se sentó frente a mí y pude notar que la polla se le puso dura, de solo escuchar lo que le estaba contando y fue tanto mi descaro que le dije: “¡Wow! se ve que la tienes bien grande”, a lo que él con una risa nerviosa me contestó: “Que era normal, que todo eso se la pone dura a cualquiera”, le dije que si quería le podía dar una mamada y me respondió: “Que yo no era capaz con su polla, ya que él era costeño y estaba acostumbrado a comer burra*”, no entendí en ese momento lo que me quiso decir, pero le reté y le dije que me probara, nos entramos hacia donde se guardaban las cosas del negocio y al entrar, con mi mano le agarré el bulto y pude sentir que la tenía demasiada dura.

Inmediatamente la sacó, me puso de rodillas y empecé a chupársela. Era gorda y larga, incluso más que la del Tieso, pero nunca las comparé, porque cualquier polla dura me encantaba, dependiendo del momento el morbo puede ser diferente y estaba muy caliente, solo de pensar que Julián, me estaba dejando chupar su polla, sin darme cuenta sentí como su leche salía por mi boca, hasta tal punto de inundarme la nariz, sin querer me tragué toda la leche.


Правообладателям