Читать книгу Espiados. Un agente: Marcelo D'Alessio. Un juez: Alejo Ramos Padilla. El poder argentino, en jaque онлайн
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El flamante juez hizo honor a lo que tanto se critica del sistema judicial: la lentitud para avanzar. Es que tres años después, el 6 de marzo de 2019 –cuando D’Alessio ya contaba con prisión preventiva producto de una sentencia de Ramos Padilla el 25 de febrero del mismo año por la denuncia de Etchebest–, Luis Rodríguez logró conseguir nueva evidencia para sentenciarlo. “Se ha logrado determinar que la imputación de Traficante como cerebro de la mafia de los contenedores (publicada por Santoro) no era real y que el vínculo de D’Alessio con el periodista Santoro existe y ha subsistido pese a la iniciación de esta denuncia en su contra a fines de 2016”12, dictaminó.
De Guillermo Coppola a Leonardo Fariña
El lunes 11 de febrero de 2019 la causa había explotado en los medios de comunicación y solo se conocían los audios extorsivos de Marcelo Sebastián D’Alessio hacia el ahora “señor Pedro” Etchebest. El entonces oficialismo ardía a más no poder y se vislumbraba un contraataque. El kirchnerismo, en su rol de oposición, estudiaba de qué manera podía sacar rédito político.