Читать книгу Más allá del ayer. Misioneros en África para Jesús онлайн
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–Pastor Noltze, de modo que usted está viajando con un mandato de una sociedad misionera –indagó el señor que estaba sentado frente a él.
Todos los ojos giraron expectantes hacia el joven vestido de negro.
–Así es. Sin embargo, debo reconocer que nunca he viajado a los trópicos. De hecho, es mi primera experiencia en el extranjero.
La respuesta agradó a los caballeros. El religioso demostraba estar seguro de sí mismo, pero sin ser arrogante. A partir del buen clima que se generó en el inicio de la conversación, los comensales se sintieron motivados a hablar sobre sus experiencias personales. Algunos de ellos eran más bien reservados y prudentes, mientras que otros tendían a exagerar sus papeles; cada una según su estilo. Karl disfrutaba de escuchar sus historias. Aquella cena resultó un momento agradable, de esos en los que el tiempo corre sin que uno lo note. Fue, también el preludio de una bonita convivencia, un contraste con las dificultades que le esperaban a Karl en tierras africanas.