Читать книгу Ni una boda más онлайн
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Aunque sus amigos se preocupaban a menudo por su incapacidad para relajarse, su carrera era lo que más disfrutaba en la vida. Ningún día era igual a otro, lo que alimentaba su apetito por la aventura y, en muchos sentidos, era su manera de ayudar a equilibrar el universo.
Usar las habilidades de supervivencia, que había aprendido de la forma más dura, para ayudar a la gente que quería volver con su familia. Solo porque su historia no hubiera tenido un final feliz no significaba que las de los demás estuvieran condenadas al mismo destino.
Al final de la ronda, los tres que no se habían retirado revelaron sus cartas. Easton ganó por mucho lo que le valió una maldición de Addie. La chica odiaba perder.
Ford también odiaba perder. Pero en las siguientes rondas, su pila de fichas de póquer se redujo y pareció no importarle.
Más que nada porque el rostro de Violet seguía dando vueltas en su mente. Tal vez era por el complejo de héroe que sus amigos lo acusaban de tener, pero ella parecía necesitar ayuda. Del tipo que iba más allá de apagar un horno en llamas.