Читать книгу Dimelo cantando онлайн

51 страница из 120

El ambiente se ha vuelto opresivo. Ya no estoy de humor para coger la guitarra, de forma que entro en Twitter y en Instagram para responder algunos comentarios. Tras unos minutos en silencio, Mason se levanta.

—Está bien, haz lo que quieras. Solo asegúrate de tener un cuaderno a mano cuando vuelvan a romperte el corazón. Así al menos tendremos nuevas canciones.

Pongo los ojos en blanco. Gilipollas.

—Megan no va a romperme el corazón.

—Si tú lo dices…

—Me gusta, ¿vale? Y yo le gusto a ella. Métete en tus asuntos.

Me pongo de pie. Quiero largarme antes de perder los estribos, pero Mason me detiene estampándome una mano en el pecho.

—No eres capaz de enrollarte con una chica sin sentir nada por ella. Megan solo quiere usarte para pasárselo bien. No va en serio contigo porque quiere tirarse a otros. No estáis en la misma onda y, como sigas engañándote, acabarás jodido. Soy el único que es sincero contigo y, si quieres cabrearte por eso, adelante.

Me sacudo para que me suelte, molesto.

—No soy yo quien está jodido por una chica, Mason.

Правообладателям