Читать книгу Mis memorias онлайн

141 страница из 217

Pero, conociendo el terreno que pisaba, de proseguir mis trabajo con el disimulo que me puse desde un principio, sin que en la casa nadie sospechase lo más mínimo, sosteniendo esa difícil situación cuidadosamente, asistiendo, con la mayor puntualidad, a las horas de comer y cumpliendo todos los encargos que se me daban, encerrándome en mi cuarto por la noche y tapando con ropa la ranura por debajo de la puerta, para que, si alguien pasaba por el corredor, no notase el resplandor de la luz y me sorprendiese en mi trabajo.

Y así continué durante todo aquel lapso de tiempo preparatorio, pero, cuando empezaron las oposiciones, mi caso transcendió a casi todo el personal dependiente de la casa, alto y bajo, especialmente de los que fueron mis maestros, que conocían de cerca la vida injusta que llevaba y conocedores de la brillante terminación de mi carrera, se interesaron por mí y por cada uno de mis ejercicios; ni uno solo dijo la menor palabra sobre el particular al director, ni a su familia, conocedores de las funestas consecuencias a que me exponía de un seguro fracaso, dados los medios de que don Federico disponía para provocarlo.


Правообладателям