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Y no sólo la naturaleza noble denota en esta edad obediencia, suavidad y vergüenza, sino que muestra también belleza y esbeltez de cuerpo, como dice el texto cuando dice: Y su persona adorna. Donde se ha de saber que también es esta obra necesaria a nuestra buena vida; porque nuestra alma ha menester ejecutar gran parte de sus obras con órgano corporal, y obra bien cuando el cuerpo está bien ordenado y dispuesto en todas sus partes. Y cuando está bien ordenado y dispuesto, es hermoso en el todo y en las partes; porque el debido orden de nuestros miembros proporciona el placer de no sé qué admirable armonía; y la buena disposición, es decir, la salud, arroja sobre aquélla un color dulcísimo a la vista. Así, pues, decir que la naturaleza noble embellece y hace su cuerpo proporcionado y grácil, no quiere decir sino que la acomoda a un orden perfecto.

Y con esto y con las demás cosas que se han expuesto, muéstrase que es necesario a la adolescencia. A lo cual el alma noble, es decir, la naturaleza noble, tiende principalmente, y como cosa que, según se ha dicho, ha sido sembrada por la divina Providencia.

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