Читать книгу Lecciones sobre la Analítica de lo sublime: (Kant, Crítica de la facultad de juzgar, § 23-29) онлайн
53 страница из 78
El lector de Kant no puede dejar de preguntarse, un día, cómo el pensador crítico nunca ha podido establecer las condiciones de pensamiento que son a priori. ¿Con la ayuda de qué instrumentos, como se dice, puede formular las condiciones de legitimidad de los juicios mientras que se supone que no puede disponer de eso todavía? ¿Cómo, en suma, puede juzgar como necesario «antes» de saber lo que es juzgar como necesario, y para saberlo? La respuesta es que el pensamiento crítico dispone, en su reflexión, en el estado en que la pone como tal síntesis todavía no asignada, de una especie de prelógica trascendental. Esta es en realidad una estética puesto que no hace sino de la sensación, que afecta todo pensamiento actual en tanto que ella es simplemente pensamiento, el pensamiento sintiéndose pensar y sintiéndose pensado, juntos. Y como pensar es juzgar, sintiéndose juzgador y juzgado, al mismo tiempo. En esta presencia subjetiva del pensamiento a sí mismo se esboza el gesto de domiciliación que viene a dirigir las síntesis espontáneas (bajos sus «títulos») a su facultad de tutela, limitando así el uso y fundando su legitimidad.