Читать книгу El bautismo del diablo. La evolución y la seducción del cristianismo онлайн

54 страница из 95

Decid entre las naciones: Jehová reina.

También afirmó el mundo, no será conmovido;

‘Juzgará a los pueblos en justicia’ (Sal. 96:10).

Incluso los reformadores protestantes Lutero y Calvino entendieron estos textos como prueba de una Tierra inmóvil; ninguno de los dos tenía mucho tiempo para la nueva astronomía. Sin embargo, ¿qué hacemos con textos como los siguientes?

Y temblarán los cimientos de la tierra. Será quebrantada del todo la tierra, enteramente desmenuzada será la tierra, en gran manera será la tierra conmovida. Temblará la tierra como un ebrio, y será removida como una choza; y se agravará sobre ella su pecado, y caerá, y nunca más se levantará (Isa. 24:18-20).

Haré estremecer los cielos, y la tierra se moverá de su lugar (Isa. 13:13).

Y Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra (Joel 3:16).

Porque he hablado en mi celo, y en el fuego de mi ira: Que en aquel tiempo habrá gran temblor sobre la tierra de Israel (Eze. 38:19).

Las palabras de Amós, que fue uno de los pastores de Tecoa, que profetizó acerca de Israel en días de Uzías rey de Judá y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto (Amós 1:1).

Правообладателям