Читать книгу Mejor no recordar онлайн

34 страница из 77

—¡Sí! Vamos a por unos churros —respondió Carlota emocionada.

—Yo paso, estoy muerto —intervino Tomás—. Me voy a ir andando que no estoy lejos, y así me despejo un poco. —Le sonreí tímidamente. Sabía que la razón por la que quería despejarse no era por la cantidad de alcohol que había bebido, sino por todo lo sucedido con Alejandra. Él estaba enamorado de ella, todos lo sabíamos. No porque Alejandra nos lo hubiese contado en la cena de chicas, sino porque después de lo sucedido en diciembre, todos decidimos hablar con él sin que Ale lo supiese. Tomás nos había confiado lo que sentía por ella y lo mucho que se arrepentía de lo ocurrido. No sabía por qué había actuado de ese modo cuando él no era así.

—Vale, Tommy. Hablamos para hacer algo todos pronto —contesté chocando sus cinco. Por mucho que nos hubiésemos divertido todos juntos esa noche, y Alejandra hubiese actuado como si nada hubiese sucedido, Tomás no se había comportado igual. Se le veía apagado y triste, y no como el chico divertido que siempre había sido.

Правообладателям