Читать книгу Más allá de las caracolas онлайн

50 страница из 126

Sé que algunas personas en determinados momentos de su vida (me incluyo entre ellas) han tenido algún tipo de experiencia extrasensorial. Intentando comprender este tipo de fenómenos, había llegado a creer que todo era producto de la mente, ilusiones producidas por nuestro cerebro, aunque desconocía qué mecanismo era el que hacía que nuestras neuronas nos engañasen, haciendo que nos pareciese real un episodio completamente imaginario e ilusorio.

Sin embargo, tras mi experiencia tan impresionante con el agua, lo que había sentido no me parecía ilusorio, sino otra cosa muy distinta. Algo mental, desde luego, pero no imaginario. Y siguiendo con mis cábalas deductivas, pienso que determinados estímulos puntuales, o un periodo de aprendizaje y mucha práctica, pueden despertar algunas facultades de nuestro cerebro, acaso atrofiadas o acaso sin desarrollar, que nos permiten tomar contacto no con mundos imaginarios, sino con otras realidades que, en las condiciones normales de nuestro día a día, no sabemos o no podemos captar.

Правообладателям