Читать книгу Incursiones ontológicas VII онлайн

33 страница из 185

Hago esta previa introducción para describir un poco a mi hija desde mi mirada, - significa que lo mencionado puede que sea diferente a los ojos de otros - el contexto desde donde me he movido y los componentes existentes para la situación que me sucedió.

Salo es niña tierna, amorosa y muy consentidora, son más sus cualidades hermosas, las cuales amo y reconozco en lo más profundo de mi ser, pero desde que Salo cumplió dos años, en ella comenzaron a aparecer brotes de mucha molestia, pataletas constantes, gritos indomables, un temperamento fuerte para rechazar cosas que no quiere, en fin, todas las características que describen los famosos terribles dos años; desde ese momento no ha sido fácil poder convivir con lo que a ella le sucede, me he dado cuenta que los gritos, pataletas, desafíos y demás cosas que ella nos realiza, a mi esposa y a mí, en medio de todo son sanos y permiten que lo que esté sucediendo en ella se libere, salga, no se quede reprimido y pueda tener un curso tranquilo, ser expulsado. Cuando veo a mi hija haciendo eso pienso en ¿por qué nosotros los adultos no podemos hacerlo también? ¿O se ve mal que lo hagamos? Gritar, patalear, llorar sin control por un espacio de tiempo, lamentar lo que tenga que lamentarse, en fin, todas estas manifestaciones liberadoras y sanadoras, a mi forma de ver, nos son reprimidas, juzgadas por la sociedad y castigadas en el momento que son vistas ¿Acaso este es el inicio de la represión en el ser humano? ¿El que no podamos liberar o canalizar adecuadamente nuestras molestias hace que las carguemos y acumulemos generando molestias mucho más grandes? ¿Cuál es la definición de la sociedad de liberar, solamente hablar? Estas preguntas me llevan a que, definitivamente, existe una represión que la sociedad ha creado y que nos ciega en el momento de educar, no porque lo reflexione de esta manera hace que yo no lo reprima, al contrario, lo estoy poniendo acá, porque fui de los primeros en ser reprimido por las mismas emociones y sentimientos por donde creo que todos los niños pasan.

Правообладателям