Читать книгу Cetreros I. Profecía онлайн

58 страница из 104

Como siempre lo habían hecho.

Cada uno de esos humanos era una leyenda para los pueblos con los que tenían contacto en mayor o menor grado. Habían recorrido grandes distancias desde sus territorios habituales para asistir al llamado, convocados por un poder mucho más antiguo que la humanidad misma. Era una llamada largamente anunciada y temida, pero habían respondido a ella con honor y esperanza.

La vida de todas y todos ellos había sido una preparación para ese instante.

Los tres hombres y las tres mujeres, tras saludarse entre sí breve y formalmente, esperaron tranquilamente a que el séptimo elemento, el jefe reconocido de todos los heraldos, se colocara en el preciso centro del claro y los convocara con el rito debido a tan señalada ocasión.

Eran las 7:10 de la mañana.

El compañero de Sabre era un hombre fornido, no demasiado alto ni muy imponente a primera vista. Sin embargo, en su barbado rostro se leían una tranquilidad y una sabiduría sin edad. Había realizado hazañas y hechos que el mundo exterior no conocería más que en parte, y eso solo en forma de historias tribales. Incluso como leyendas. Pero a él eso lo tenía sin cuidado. Su verdadera misión, el motivo principal de su existencia, estaba ahí. En ese preciso instante y lugar. Y el sabio hombre sentía plenamente el enorme peso de esa responsabilidad. Porque ese sería un momento definitivo para la raza humana.

Правообладателям